¿A qué email puedo enviarte la miniguía?
Entra tus datos a continuación, indica si aceptas la Política de Privacidad y pulsa el botón para enviar tus datos:
No hay nada que se compare a la emoción de querer escribir una historia. Después de días o semanas de experimentar la dulce tortura de ver una y otra vez imágenes en tu mente dejas de pelear y dices:
“Ok, ok… No más… Me sentaré a escribir tu historia”.
Antes de escribir la primera palabra de nuestra novela los nervios están de punta. Sientes mariposas en el estómago y las manos sudan. La duda te asalta y los dedos te tiemblan –ya sea que utilices el papel o las teclas del portátil–. Es algo así como la primera cita. Aunque si lo pensamos bien, realmente es tu primera cita con los personajes. Es la primera vez que bailarás al son de su música.
Luego de varias respiraciones profundas, espantar los espíritus nerviosos de los dedos, decides sentarte frente a la pantalla o papel blanco. Pero cuando vas a escribir la primera palabra te das cuenta que tienes que decidir que voz de narrador vas a utilizar para contar la historia; ¿Primera? ¿Tercera?
Entonces sientes que el aire se queda atascado en tu garganta y te quedas en estado catatónico…
Decidir la voz del narrador de la historia puede paralizarte pero que no cunda el pánico. En este artículo quiero ayudarte a tomar la decisión. Share on XVeamos que son estás voces y cómo te pueden ayudar en la historia. (más…)
Creo que dentro de cada ser humano existe el anhelo de dejar una huella en este mundo. Algunos lo hacen a través de su ADN, otros al enseñar a las generaciones jóvenes y otros prefieren las artes.
Con toda honestidad te puedo decir que ver en blanco y negro las imágenes que solo existían en tu imaginación es una aventura que produce mucha satisfacción. Share on XAunque somos muchos los que deseamos dejar nuestra huella por medio de la eternidad de las palabras, lamentablemente no todos logran publicarlas. Esto, no por falta de empeño, sino por desconocimiento o por los mitos que rodea la publicación. Y sobre ellos hablo en el artículo 3 mentiras ridículas que te hicieron creer sobre publicar un libro.
Si ya has desenmascarado estas mentiras y quieres lanzarte a esta aventura maravillosa es imprescindible que utilices las herramientas adecuadas.
Existen varias maneras y diversas herramientas que te pueden asistir tanto en el proceso de escritura como en la preparación de los archivos para publicar. En este artículo mencionaré las mas conocidas y utilizadas, de modo que puedas evaluarlas y decidir cuales deseas utilizar.
¿Estás considerando la idea de publicar tu libro?
Como autora de varios libros, te puedo decir con toda sinceridad que escribir y publicar un libro creado por ti mismo es una experiencia llena de mucha satisfacción.
Lamentablemente, al considerar la idea de crear un libro, muchos desisten de ésta antes de comenzar a escribir la primera palabra. Las razones pueden ser varias, pero en mi opinión todas están fundamentadas en nociones erróneas, anticuadas y en algunos casos ridículas sobre lo que es ser autor de un libro.
Examinemos algunas de ellas a continuación.
Algunas personas me han escrito estas palabras como parte de sus consultas. Tienen el deseo de compartir sus vivencias conocimientos o simplemente alguna historia de ficción que les ronda en la cabeza, pero a la vez se ponen un freno.
Piensan que para escribir un libro necesitan ser expertos en gramática, ortografía y la técnica de escritura. O que necesitan tener algún título universitario que les otorgue el permiso para hacerlo. ¡Nada mas lejos de la verdad!
Por si no lo sabías, algunos de los grandes escritores y novelistas de todos los tiempos—F. Scott Fitzgerald, Ernest Hemingway y Jane Austen, por nombrar algunos—tenían dificultades con la ortografía. Y eso no fue impedimento para publicar sus obras.
(Te digo un secreto: Para eso existen los profesionales en edición.) (más…)
Tendrás que luchar en contra de varios monstruos y dragones (la pantalla blanca inseguridades y temores). Durante el proceso sentirás palpitaciones, tendrás desvelos y momentos de embelesamiento.
Pero sobre todo tendrás unos meses de trabajo arduo. Sin embargo, te aseguro que al final saborearás la dulce recompensa de ver tu libro terminado (o casi, casi…).
Ahora bien, verlo terminado no es tu único deseo. ¡No señor!
Quieres palparlo, olerlo y verlo publicado como ebook en la librería más grande y conocida a nivel internacional; Amazon.
(Y por supuesto quieres que tu libro sea leído por muchos)
Una vez terminado ese primer borrador ya queremos saltar de nuestra silla para publicarlo.
Pero, ¡tranquilo chiquillo! Debes tomarlo con calma y detenerte un tantito que primero se aprende a dar pasitos antes de correr en el maratón. El primer paso después de terminar el primer borrador sería la auto edición.
Durante este paso es importante que revises la ortografía, sintaxis y fluidez de las palabras en cada oración.
Tip: Algo que siempre me ayuda cuando estoy editando mi borrador es leer en voz alta. Así me doy cuenta de las palabras y frases que no engranan con el resto de la oración. (más…)
Ese fue un extracto de un capítulo de la novela Las voces de Etervan escrito hace algún tiempo atrás pero hoy resuena en mi corazón. Siento que este año pasó a toda velocidad como el recorrido en una montaña rusa; con subidas, bajadas, líneas rectas y curvas.
Usualmente el mes de diciembre nos pone a revisar y reflexionar sobre lo que pasó durante el año que pronto terminará.
¿Cuánto he crecido, aprendido y madurado? ¿Estoy satisfecho con los logros alcanzados? ¿Qué quiero lograr en este año que se acerca? Son las preguntas que usualmente nos hacemos. Mientras revisaba mi año, me di cuenta que pasaron cosas extraordinarias y terribles.
En el mes de febrero tuve la oportunidad de viajar a España para un evento para emprendedores en línea llamado TribuCamp 2017. Este evento resultó ser el catalítico para cambiar de dirección en este blog.
Escuchar las ponencias de cada emprendedor encendió una llama en mí que hasta ese momento no sabía que necesitaba encender. “Si ellos pudieron también puedo hacerlo”, pensé.
Comencé a hacer contactos y darme a conocer. Una de las cosas que había escuchado y leído es que debes dejar la timidez a un lado si quieres triunfar y lanzarte aunque sientas miedo o pienses que no tienes todas las cualificaciones necesarias.
Mi primera oportunidad se presentó a través de uno de los grupos de emprendedores online que participo. Uno de los miembros (Víctor Lloret de Surfea tu vida) hizo una invitación para participar de su blog en un post llamado 11 historias inspiradoras para que nuncas dejes de luchar por tus sueños.
Si después de leer la advertencia todavía insistes en escribirla, ¡te felicito! También acepté el reto y terminé un poco más trastornada pero viva que es lo importante.
Cuando decidí escribir Las voces de Étervan, supe que sería un gran reto. Nunca había escrito más de 5,000 palabras y no sabía si podría superar ese número.
¿Cómo lo logré?
Te comparto lo que aprendí durante mi proceso.
Toda historia comienza con una idea y un tema. En mi caso comenzó con un sueño. No me refiero a una metáfora. Hablo de un sueño, de esos que te ocurren en las noches al dormir. Fue uno extraño y medio tormentoso; con una guerra entre elfos, una cuidad en llamas rodeada de un gran muro y el deseo de una joven de acabar con todo aquello.
Cuando desperté, anoté todo lo que vi y sentí en el sueño –en mi mesa de noche descansa una libreta donde hago apuntes. Luego de este “incidente” mi vida cambió. De tanto en tanto pensaba en las imágenes de aquel sueño e imaginaba las razones de toda aquella guerra.
Así que en mi caso la categoría vino primero y después de purgar sobre las razones de todo aquel escándalo encontré mi tema central y subtemas.
Posiblemente en tu caso todo surgió con esta pregunta “¿qué pasaría si…?” y ding ding nació tu tema.
O quizás tienes miles de temas que podrías escribir pero no sabes cuál escoger. Si este es tu caso en el artículo 3 elementos esenciales para escribir un ebook que atraiga a tus lectores comparto unos consejos que te pueden ayudar.
Si por el contrario, no tienes idea de qué tema escoger para tu novela te recomiendo que leas este artículo de Alejandro Quintana: Temas para escribir una novela y ser al menos un poco original.
Aunque en una novela se puede tratar más de un tema, es recomendable mantener un tema central y dejar los otros como secundarios. Por ejemplo un tema central puede ser la identidad o la falta de identidad –que trato en mi novela– pero como subtema se puede tratar la lucha contra la opresión y la injusticia.
Puede que te parezca que el tema que escogiste es muy común y que no vale la pena escribir sobre eso. Bueno te diré que sí, posiblemente tengas razón. Sin embargo, te invito a meditar en esto, quizás ya se escribió de ese tema pero no se ha escrito desde tu punto de vista.
Y como dice mi querido amigo Alejandro Quintana en el artículo que te compartí: “La vida es una gran historia y ser escritor consiste en saber contarla.” (más…)