Ese fue un extracto de un capítulo de la novela Las voces de Etervan escrito hace algún tiempo atrás pero hoy resuena en mi corazón. Siento que este año pasó a toda velocidad como el recorrido en una montaña rusa; con subidas, bajadas, líneas rectas y curvas.

El viaje que cambió mi vida

Usualmente el mes de diciembre nos pone a revisar y reflexionar sobre lo que pasó durante el año que pronto terminará.

¿Cuánto he crecido, aprendido y madurado? ¿Estoy satisfecho con los logros alcanzados? ¿Qué quiero lograr en este año que se acerca? Son las preguntas que usualmente nos hacemos. Mientras revisaba mi año, me di cuenta que pasaron cosas extraordinarias y terribles.

En el mes de febrero tuve la oportunidad de viajar a España para un evento para emprendedores en línea llamado TribuCamp 2017. Este evento resultó ser el catalítico para cambiar de dirección en este blog.

Escuchar las ponencias de cada emprendedor encendió una llama en mí que hasta ese momento no sabía que necesitaba encender. “Si ellos pudieron también puedo hacerlo”, pensé.

Comencé a hacer contactos y darme a conocer. Una de las cosas que había escuchado y leído es que debes dejar la timidez a un lado si quieres triunfar y lanzarte aunque sientas miedo o pienses que no tienes todas las cualificaciones necesarias.

Mi primera oportunidad se presentó a través de uno de los grupos de emprendedores online que participo. Uno de los miembros (Víctor Lloret de Surfea tu vida) hizo una invitación para participar de su blog en un post llamado 11 historias inspiradoras para que nuncas dejes de luchar por tus sueños.

Miré la invitación y recordé esta cita:

Me considero una persona reservada. Usualmente no ventilo mis problemas o situaciones difíciles. Así que contar parte de mi historia (lo que me motivó a emprender) era justo lo que no estaba acostumbrada a hacer.

Me lancé a pesar de sentirme incómoda.

Atreverme a dar ese paso desató magia en el universo. Otro emprendedor en línea me contactó, Keiner Chará (hasta ese momento no lo conocía) para que participara en su podcast y hablara sobre Cómo escribir un ebook que engache con la audiencia.

Pierde el miedo de contar tu historia. Uno nunca sabe el impacto que ella puede tener en la vida de otros y en tu propia vida.

También tuve el privilegio de participar en un Talk Show Online con la coach Meryland Cuevas llamado Otros $20 Pesos, contando Cómo el diagnóstico del Síndrome de Fatiga Crónica cambió mi vida y en el podcast de Joeh Bernard de Corazones Emprendedores hablando sobre Cómo salir adelante a pesar de las dificultades e imprevistos de la vida.

Mi participación en esos artículos y podcasts causó una revolución en mí y en las personas que lo recibieron. Muchos me escribieron contándome como mi historia los ha fortalecido para seguir adelante y perseguir sus sueños.

Además de las entrevistas también tuve la oportunidad de ayudar a varios escritores a publicar sus libros en Amazon a través de mis servicios.

(Poder ayudar a otros escritores a realizar su sueño de ver publicado su libro es una de las cosas que me llena de mi trabajo.)

Los sueños pueden hacerse realidad

No es un cuento de hadas. Es una realidad. En general pienso que el viaje a España, rompió el velo de lo imposible y me dejó ver que los sueños se hacen realidad.

Me hizo pensar que no se debe esperar que la vida pase de largo. Con decisiones y acciones podemos hacer que los milagros ocurran.

Verás, desde niña he sentido una fuerte atracción por los castillos. Tienen tanta historia impregnada en sus paredes…

Pues bien, para mi sorpresa y la de mi esposo cuando decidimos comprar los pasajes para el evento de TribuCamp nos dimos cuenta que el vuelo hacía una escala de 15 horas en Londres. Como nosotros no somos personas típicas, en lugar de ir a la ciudad de Londres decidimos reservar entradas para ver el Castillo Hever. Fue el lugar de crianza de Anne Boleyn, la segunda esposa de Henry VIII.

Al llegar allí, la emoción de mi sueño de niña se deslizó en varias lágrimas. Recorrí cada cuarto y pasillo imaginando las historias que se escondían en ellas y que el tour no delataba.

El jardín exterior del castillo me recordó a varias escenas que ya había escrito en mi novela y nuevamente la emoción recorrió por mis mejillas.

Estaba extasiada y asombrada. No podía creer que mi sueño de niña se estaba haciendo realidad. Bebí cada instante como bebo mi café en las mañanas; despacio y saboreando cada sorbo.

Para mí fue el día perfecto a pesar de sentir los efectos del cambio de horario.

Luego de nuestra parada en Londres y de compartir con varios emprendedores en el evento de TribuCamp, tuvimos la oportunidad de compartir con unos amigos que conocíamos hacía años por la web pero no los habíamos visto en persona.

(De izquierda a de derecha: Sarah, José Luis, Felisa, yo y mi esposo)

Esos angelitos planificaron varias visitas a lugares importantes. Por mencionar algunas; el Palacio Real de la Granja de San Ildelfonso en Segovia, el Castillo el Alcazar en Segovia, y la Cuidad amurallada de Ávila. Les estoy eternamente agradecida por ser parte importante de hacer mi sueño realidad y enseñarme estos lugares tan hermosos.

(El Alcázar de Segovia)

(La ciudad amurallada de Ávila)

No todo puede ser color de rosa

A pesar de todas estas experiencias tan maravillosas el 2017 no fue todo color rosa.

El 19 de septiemre todo el país de Puerto Rico estaba realizando los últimos preparativos para el azote inminente del huracán categoría 5 llamado María; por cierto el más potente registrado en la historia moderna de nuestro país. Pero la realidad era que no teníamos idea como este huracán iba a impactarnos como individuos y país.

(El huracán era tan grande que la isla no se ve en el mapa, solo el gigante que la arropa)

El 20 de septiembre el huracán entró a las 6:15 am– como categoría 4 – con toda su potencia por el sureste de nuestra isla y continuó su rumbo hacia el noroeste. El rugido de los vientos era aterrador, parecían gritos. Las paredes de cemento de mi casa vibraban con tal intensidad que pensé que las ventanas y puertas saldrían volando. Gran parte de las horas que estuvo azotándonos lo pasé en el pasillo porque era el lugar en donde me sentía más segura.

Honestamente nunca me había sentido tan aterrada como esas horas mientras el huracán nos arropaba.

Hay un refrán muy famoso que dice que luego de la tormenta viene la calma. Bueno, luego de largas horas, los vientos cesaron pero con ello vino el golpe de ver lo que quedó de nuestra bella isla; devastación, desolación, falta de agua potable y electricidad. Mi país estaba bien un día (a pesar de sus dificultades económicas) y al próximo hecho pedazos.

El país entero quedó en total incomunicación y oscuridad (al momento de escribir este artículo muchas partes del país continúa sin servicio de energía eléctrica). Pasé 5 días sin saber de mi familia hasta que logré escuchar la voz de mi madre a través de un teléfono satelital que el vecino gentilmente me prestó. La llamada duró un minuto y medio. Pero fue el minuto y medio más feliz de mi vida. La alegría de escuchar su voz temblorosa por las lagrimas que sé que salieron de ojos y saber que estaba bien fue inexplicable, incomparable. Ella y mis hermanos estaban bien pero pasaron otros 5 días hasta que los pude abrazar.

La gran decisión

“Vi el puente de madera con algunas tablas quebradas y el gran abismo que había debajo. Una oscuridad densa de incertidumbre me hacía burlas desde abajo. Mi mente me decía que no mirara atrás pero fue inevitable. Allí estaba mi casa, la mayoría de mis pertenencias y los más importante, el resto de mi familia. Mi corazón se hundió en mi pecho y lágrimas saltaron de mis ojos. Mis piernas temblaron y por varios segundos dudé. Elevé mi mirada y nuestros ojos se entrelazaron con el mismo pensamiento. Él tomó mi mano, movió su cabeza en dirección al puente. Asentí y dimos el primer paso…”

Esto lo extraje y modifiqué de una parte de la novela “Las voces de Étervan” pero a la vez es una analogía de lo que mi esposo y yo vivimos hace 4 meses atrás.

Antes de todo este incidente mi esposo y yo habíamos conversado sobre nuestro sueño de vivir de nuestro negocio en línea. Hasta ese momento él trabajaba como maestro de guitarra en una escuela especializada y trabajaba part time online. Yo también estaba trabajando en línea ofreciendo mis servicios de maquetación de ebooks.

Una noche conversábamos mientras mirábamos las estrellas – con la intensa oscuridad que dejó el huracán, era la experiencia más sublime que podíamos hacer– y tomamos la decisión de salir del país y, mudarnos a los Estados Unidos.

Entendimos que era nuestro tiempo de comenzar una nueva vida, de perseguir nuestro sueño. Ya bastaban las excusas interminables sobre cuándo sería el momento “perfecto”.

Sabíamos que el momento lo teníamos que hacer nosotros. Era ahora o nunca.

Necesitábamos comenzar a vivir lo que ambos enseñamos en nuestros blogs y redes sociales; perseguir los sueños, vivir de lo que te apasiona hacer.

(Es aterrador dejar todo atrás; casa, familia, amigos, “seguridad” y “estabilidad” por caminar el puente que te llevará a tu sueño. Precisamente eso fue lo que hicimos mi esposo y yo el 15 de octubre de 2017. Las palabras seguridad y estabilidad las escribí entre comillas porque estos últimos meses he aprendido que en esta vida no hay nada seguro.)

El 15 de octubre llegamos al estado de Florida solo con 2 maletas; una llena de ropa y otra con el equipo mínimo que necesitábamos para continuar nuestro trabajo en línea.

Han sido unos meses intensos y de diversas emociones.

Te comparto lo que escribí en mi diario en esa semana cuando llegamos:

“La mañana huele distinta. El aire de otoño en este lugar se siente fresco y liviano. El sol entibia mi cuerpo mientras el viento frío alborota mis cabellos. Todo es extraño. Todo es nuevo para mí. Pero en mis entrañas hay una extraña sensación que me dice que esto es precisamente lo que necesito.
Cada día me ofrece algo distinto. Todo lo percibo más intenso. Mis sentidos se alborotan a cada instante.
Esta mañana analicé el por qué me siento así. Es que me lancé a perseguí mi sueño y dejé atrás mi familia, pertenencias, mi patria y un mar de recuerdos. Dejé parte de mi corazón para re-encontrarme. Sé que no será fácil, pero pienso que lo que llega fácil no se disfruta o saborea al máximo. Y yo quiero y me propongo palpar y saborear esta nueva Aventura con sus altas y bajas.
No cabe duda que esta mañana de otoño huele distinta; a alegría y melancolía, a retos y hazañas, a miedos y esperanzas.”

Todavía no sé como continúa esta historia. La historia que tanto mi esposo y yo comenzamos a escribir con decisiones y acciones. De lo que sí estoy segura es que siempre la luz brilla al final del túnel.

Agradecida y lista para las próximas aventuras

Estoy agradecida por todas las personas que me dieron la oportunidad de participar de sus páginas compartiendo mi historia y conocimientos en autopublicación. También agradezco por todo lo que sucedió en mi vida durante este año 2017. Dejé muchas cosas atrás; familia, amigos, mis propiedades, seguridad y viejos hábitos pero gané nuevas experiencias, aprendizaje, crecimiento, amigos. Pero sobre todo ahora sé de lo que estoy hecha.

Cada una de estas experiencias me ayudó a tomar acción, crecer y emprender.

Por el momento te puedo decir que mi esposo y yo comenzamos una verdadera aventura desde que decidimos emprender y perseguir nuestros sueños.

(La vista desde el apartamento que vivimos)

El año 2017 se va y otro año de aventuras comeinza.

No sé a que otras hazañas me enfrente en el 2018 pero sí estoy segura que continuaré trabajando por mis sueños y ayudando a todo escritor que quiera perseguir los suyos.

(Evento Escribe, Ilustra & Publica Tu Libro del que fui partícipe el pasado mes de noviembre)

¡Deseo que en este nuevo año tengas aventuras, crecimiento y cumplas tus sueños!

¿Este año 2018 te animas a resetear tu vida? ¿Te lanzas a la aventura de perseguir tus sueños?

Cuéntame que tal te fue este año. Sigamos la conversación en los comentarios abajo 🙂